En este post queremos cuidar algunos consejos a la hora de comprar tu vivienda, porque sabemos que la compraventa de un inmueble se trata de un arduo proceso en el que todo debe salir a pedir de boca. Allá vamos…
Tal cual se encuentra el mercado inmobiliario, las cosas han cambiado y mucho. La crisis en la que se encuentra nuestro país, la gran competencia entre las distintas entidades financieras ha provocado una situación complicada a la hora de vender o comprar una vivienda. Un comprador que disponga de ahorros, tiene más posibilidades de negociar un precio de cara al particular propietario de la vivienda. Hace doce años, las viviendas se vendían en cuestión de días. Si eras un comprador con dudas, corrías el riesgo de quedarte sin vivienda, ya que habría otras muchas personas interesadas en comprarla. Ahora ya no es el caso. A día de hoy toca ser flexible y negociar las diferentes propuestas expuestas por parte del comprador, ya que si no, es muy probable que no pueda vender la vivienda en mucho tiempo.
¿Qué vas a encontrar en este artículo?
Negociar el precio de la compra de una vivienda es posible
Para negociar el precio de una vivienda, hay que tener en cuenta ciertos aspectos. Hay que saber cómo negociar, y qué aspectos hay que tener en cuenta. De primeras, hay que ser conscientes y realistas de los ahorros de los que disponemos. Acudir a un banco es la alternativa más viable, pero a día de hoy, ya no financian el 100% del procedimiento. Si además necesitas ese financiamiento, solamente dispondrás de las viviendas que ofrece el banco, y la negociación ya no será viable ya que poseen una política de precios muy fijada y establecida.
Es importante establecer un precio según la zona que te interese…
No es lo mismo tantear un precio en una zona o en otra. Si te encuentras en Madrid capital, el precio de partida será probablemente muy elevado. Sin embargo, es importante tener clara la zona en la que residir, de esta forma, reducirás considerablemente la búsqueda y será más fácil hacerse una idea de los precios que se mueven por esa zona. Lo idea es acercarse a cualquier portal inmobiliario, tantear los diferentes presupuestos y comparar las diferentes ofertas según el presupuesto del que dispongas. En cuanto tengas la casa de tus sueños, esa casa que llevas tiempo buscando y por fin das con ella, negocia la forma de pago, los diferentes plazos establecidos, si estas interesado en hacer arreglos (porque son necesarios) o si te gustaría quedarte con el los muebles. Si negocias un precio acorde a las condiciones que el inquilino ofrece, será mucho más fácil llegar a un acuerdo.
Negociar el precio es más fácil con ayuda de un profesional
Acudir a una agencia inmobiliaria, te resolverá muchas dudas y tendrás mucha más información a tu disposición; sin embargo, si decides acudir directamente a un particular, la gestión puede resultar más complicada. A través de la inmobiliaria, podrás descubrir las distintas ofertas además de orientarte. Cuando quieres comprar una vivienda, quieres estar al tanto de todo, verlo todo, saberlo todo. Muchas veces, si acudes directamente a un particular, la visita puede ser mucho más descuidada que si hay un profesional de por medio gestionando todos los aspectos. A través de la agencia, sabrás a qué ofertas puedes optar y hasta dónde puedes negociar.
Si has encontrado la casa de tus sueños, no desistas, valora el estado del inmueble, la necesidad que puede tener el vendedor para vender su vivienda… Una vez hayas gestionado bien la compra, y hayas podido llegar a un acuerdo en el que ambas partes estéis de acuerdo siéntete satisfecho de haber dado con ésa casa tan esperada.
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